LOS ABRUZZOS ✏️ Region-Italia

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Italia es, sin duda, uno de los países más interesantes del mundo en términos turísticos. Como España o Francia, prácticamente todos sus rincones ofrecen muchas posibilidades para que un viaje por la zona sea todo un éxito. Pero ocurre que algunas áreas quedan eclipsadas por la contundente fama de las más destacadas, tanto ciudades como regiones. Roma, Venecia, Florencia y la Toscana, Sicilia, los lagos del norte, Nápoles y la costa Amalfitana... etc son auténticos imanes que atraen con una fuerza irresistible a la inmensa mayoría de los turistas. Sin embargo, hay mucho más, afortunadamente, y nos encontramos con sorpresas bastante menos populares pero que no decepcionarán al viajero más exigente. Entre ellas, la Puglia, (Apulia www.losviajeros.com/ ...lia-PUGLIA) por ejemplo, o la que vamos a explorar en este tip, Abruzzi o Los Abruzzos.


Esta región del centro de Italia, quintaesencia de los Apeninos, la otra gran cordillera del país, carece de ciudades monumentales como las mencionadas anteriormente, pero ofrece magníficos paisajes de montaña, un verdor exuberante, preciosos pueblos con bellísima arquitectura popular en enclaves sorprendentes y perfectamente conservados sin alterar su aspecto medieval, lagos, castillos y muestras arquitectónicas de gran interés y variado estilo, desde la civilización romana hasta el barroco. Veamos una muestra de lo que esta parte cercana a Roma nos puede ofrecer.



En el centro de la región nos encontramos una muy atractiva ruta circular para realizar en un día en coche siguiendo las carreteras SS479 y SS17. Partiendo de Sulmona, por ejemplo, -que puede resultar el mejor lugar para alojarse no solo por su mayor y más variada oferta, sino también por ser el mayor núcleo de la zona y por su interés monumental- nos acercamos por una llamativa carretera de montaña a Anversa, bonito pueblo de estampa medieval encaramado en una ladera y a la entrada de un desfiladero, todo rodeado de un intenso verdor. Inmediatamente, y a solo 5 km, podemos subir a la pequeña aldea de Castrovalva, en un espectacular emplazamiento sobre una cresta con unas magníficas panorámicas a ambos lados. Comienza la garganta del Sagittario por la que discurre la carretera y en 9 km llegamos al pequeño pero precioso lago de san Domenico, enclavado entre montañas de exuberante vegetación. Vale la pena subir al pueblo de Villalago para acceder a un par de puntos panorámicos en altura para contemplar una bonita vista del lago-embalse.


La ruta continúa con otro lago, el de Scanno, más grande que el anterior, aunque menos atractivo y fotogénico. Pero el pueblo del mismo nombre es uno de los puntos fuertes de este recorrido. En SCANNO, su arquitectura tradicional, muy homogénea en todo el conjunto urbano, se merece un amplio paseo por su complejo entramado, su tipismo, su inalterable aspecto medieval y el gran encanto de muchos de sus rincones. Probablemente la más bella de las muchas atractivas localidades de esta región.


Más adelante, a unos 27 km, otro hermoso lago, el de Barrea, formado también por un embalse y con una muy bella estampa del pueblo del mismo nombre en lo alto. Éste también tiene un genuino sabor medieval y se hace imprescindible su visita, sobre todo la parte alta del mismo.



Estamos en el punto extremo de la ruta, a partir de Alfedena cambiamos la dirección por la este para en pocos km girar de nuevo, esta vez hacia el norte para completar el giro y terminar en el punto de inicio, Sulmona. Por la carretera SS17 hay menos lugares para visitar, pero el paisaje continúa siendo atractivo, por ejemplo la estampa de Scontrone, otro pueblo encaramado en lo alto de una colina, boscosa. Y en esta zona el núcleo más interesante para visitar es Pescocostanzo, con un bien conservado conjunto urbano.


Esta interesante ruta es apropiada para una jornada con muchas horas de luz, finales de primavera, por ejemplo, y aprovechando bien el tiempo, de lo contrario habría que dejarse algunos puntos fuera de ella, por ser demasiado apretada.
SULMONA
Esta pequeña ciudad de unos 25.000 habitantes es muy recomendable como base de operaciones ya que se encuentra situada entre tres parques nacionales. Posee un considerable patrimonio monumental de diferentes épocas, principalmente iglesias góticas y barrocas, un buen palacio gótico-renacentista (della Annunziata), varios museos y un atractivo conjunto urbano histórico en el que destaca la imprescindible arteria vertebral Corso Ovidio y las calles adyacentes.


PACENTRO
A solo 7 km de Sulmona este bonito pueblo destaca por su magnífica estampa medieval en el frondoso paisaje de la zona. Las torres del potente castillo y el entramado urbano encaramado en la montaña invitan a recorrerlo de punta a punta, por supuesto recorriendo a pie la ruta desde el inicio en el suroeste hasta la fortaleza en el extremo opuesto.



Otra visita muy cercana a Sulmona es el monasterio de Santo Spiritu Al Morrone.
Hacia el norte se pasa por algunos pueblos de cierto interés, como la fotogénica imagen de Roccacasale, con el núcleo urbano bajo los restos de su castillo, pero la fortaleza más impactante de toda esta región es la de Rocca Calascio, no tanto por su arquitectura o tamaño sino por su ubicación en el punto más alto de una montaña de 1500 metros. Las vistas desde allí son magníficas, abarcando un amplísimo panorama en todas direcciones. Se puede acceder en coche hasta la aldea más cercana y luego hay una breve caminata de menos de 10 minutos.


Los parques nacionales son un paraíso para los senderistas, solo el Parco Nazionale d´Abruzzo, Lazio e Molise, al oeste de la región, ofrece unas 150 rutas, además de algunos pueblos de interés, como Opi, con un bello emplazamiento y un par de calles atractivas o Pescasseroli en cuyo núcleo urbano hasta es posible encontrarse algún oso, como indican los carteles en sus calles. Pero también los parques de la Maiella, con su mítico Sendiero della Libertà, ruta para varias jornadas con sus 60 km, y el del Gran Sasso e Monti della Laga, con el pico más alto de los Apeninos, Corno Grande, de casi 3.000 metros, son muy recomendables.