Buenas!
Después de nuestro viaje dejo por aquí nuestra experiencia en el Iberostar Quetzal 5*.
El personal del hotel genial en líneas generales, muy amable y servicial. Te tratan de 10. La limpieza del hotel muy buena, cada poco están pasando a recoger vasos, etc.
La habitación que nos tocó era bastante amplia, con TV, sofá, aire acondicionado, ventilador, minibar, armario ropero y zapatero, cama de 1,8m, tabla de planchar y plancha, baño muy completo con amenities (un pequeño repelente) y secador. También había paraguas algo importante ya que en días de lluvia es necesario. La limpieza fue buena.
El entorno es como estar en medio de la selva, hay mucha vegetación y animalitos por el hotel. Hay flamencos, grullas y monos que en nuestro caso (al tocarnos la habitación en la planta alta) saltaban de los árboles al tejado del hotel y de ahí bajaban y se paseaban de vez en cuando por los balcones de las habitaciones, son totalmente inofensivos nosotros no tuvimos ningún problema. Lo malo de los monos es que por la noche se ponen a aullar y a veces es difícil poder dormir del tirón sobre todo la primera noche con jetlag incluido y sin saber qué era aquel sonido.
La animación del hotel fue muy buena, había todos los días y tanto de día como de noche. Para todos los públicos. Nos gustó mucho.
Los restaurantes hay de todo, los que son buffet son "normalitos" no varían mucho los menús, recomiendo ir a primera hora porque es cuando está todo mejor y hay platos que si vas mas tarde y se han terminado ya no reponen. También había restaurantes a la carta pero hay que reservar, esos ya son de mejor calidad con platos más elaborados y más sabrosos. Había japonés, italiano, tex-mex, 2 buffet...
En la zona de piscina hay una heladería, no son los mejores helados del mundo pero bueno está aceptable, también hay un "kiosko" que es un pequeño restaurante buffet donde puedes comer durante el día cuando los otros restaurantes no están abiertos, hay patatas, hamburguesas, salchichas, nachos... No está mal pero siempre es lo mismo.
En la zona de piscinas hay varios bares siempre abiertos durante el día donde tomarte un buen cóctel o cualquier otra bebida, también hay un bar dentro de una de las piscinas. Nosotros no fuimos porque olía muchísimo a cloro.
Las toallas de piscina/playa las podías cambiar todos los días y menos mal porque con tanta humedad que hay es difícil que seque la ropa allí. Por lo que escuchamos en el aeropuerto a otros viajeros en muchos hoteles no les cambiaban las toallas tanto de la habitación como de piscina todos los días y que olían mal... Así que en ese aspecto nos sentimos privilegiados porque no tuvimos problema alguno.
La playa era muy buena, estaba muy limpia y no hubo nada de Sargazo. Nos llovió 2 días pero lo típico que llueve allí un rato y al poco todo sigue como si nada.
El único pero que le puedo poner a este hotel es la comida que podría ser mejor y luego el tema de hamacas tanto en playa como en piscina es difícil de encontrar porque hay mucha gente irrespetuosa que llega y deja su toalla e igual no aparece en todo el día en la hamaca entonces habían un montón de hamacas ocupadas sin nadie en ellas.
A pesar de no ser todo perfecto volveríamos a este hotel. La decoración es muy bonita y respetuosa con el entorno. Todo es bastante natural e integrado con la naturaleza. No es el típico hotel de construcción industrial. Hay mucha vegetación, construcciones de madera, fuentes, cascadas, palapas, etc. Wifi disponible en todo el complejo, rápida velocidad.
La ubicación del hotel es dentro de la urbanización Playacar, a 10 minutos en coche del centro del pueblo de playa del carmen. Puedes quedarte en esa zona de la urbanización, tienes de todo, farmacia, casas de cambio, tiendas de alimentación, tiendas de souvenirs, etc. O también salir de la urbanización a playa del carmen, en el propio hotel puedes cogerte un taxi que te deja en el mismo centro. Los taxis tienen tarifas fijas por lo que pagas lo que toca sin sorpresas. La zona en la que estaba el hotel era segura, en ningún momento notamos nada raro, así como en el pueblo de playa del carmen, había coches de policía cada poco y nadie nos hizo sentir inseguros. Obviamente todos los dueños de los puestos quieren venderte pero sin más, puedes hacerles caso o no.
En cuanto al tema de mosquitos en la zona del hotel no había y en las excursiones que hicimos no tuvimos problema, nos pusimos un poco de Relec dependiendo a la zona que vayas y solucionado.
Espero que nuestra experiencia os ayude.
Un saludo.