INDOCHINA 2010: DEL CIELO AL INFIERNO ✏️ Blogs de Asia Sudeste

Como decía Baltasar Gracián: "Lo bueno, si breve, dos veces bueno". No sé si estas líneas serán buenas, pero puedo asegurar que serán breves. Esta vez cambiaré mi modus operandi (en cuanto a diarios se refiere) por lo que haré un relato más o menos global de vivencias, experiencias e impresiones que el acercamiento a estos países nos ha producido.

El viaje no representaba un gran reto, sin embargo, era la primera vez que combinábamos diversos países del sudeste asiático. Resultado: 9 aeropuertos distintos en 6 países diferentes; un total de 16 despegues y aterrizajes; 6 divisas diferentes en la cartera y en la mente (un reto para el contable y banca durante el viaje). Un total de 33 días saliendo de Valencia y pasando por: Londres, Abu Dhabi, Kuala Lumpur, Camboya y Vietnam.

Este año, pese a que me encanta Asia, tocaba ya un cambio de continente, me apetecía Oceanía ya que había leido comentarios muy positivos sobre NZ. Además había encontrado un vuelo a Australia a un precio más que razonable. Jose, a su vez, seguía empeñado con el continente amarillo y en concreto con Vietnam. No sé por qué pero quería ver Charlies .

Pasaban los días pendiente de la evolución de precios de los vuelos a NZ y Vietnam. Entretanto, seguía leyendo comentarios por el foro a cerca de los dos destinos: mientras que los de NZ no podían ser mejores ; los de Vietnam (en ocasiones) dejaban bastante que desear . Las ganas y la curiosidad por conocer la tierra de los kiwis iba en aumento. La campaña pro NZ no daba tregua y ya tenía a Jose medio convencido para ir al lugar donde nació la más hermosa de las razas de la Tierra Media cuando Etihad (la principal compañía de Emiratos Árabes) lanzó una promoción para ir a Kuala Lumpur haciendo escala en Abu Dhabi. Como desde KL hay conexión a prácticamente toda Asia gracias a AirAsia ya no hubo marcha atrás. El mono asiático de Jose por la comida, la cultura y cómo no!... las compras (especialmente camisetas de fútbol) se despertó como un gigante que ha permanecido largo tiempo adormilado.

Así fue como guardé en mi memoria todo lo aprendido sobre nuestras antípodas para otra ocasión.

Y ahora, 2 meses por delante para empaparme de información y preparar la ruta. Tabula rasa y a trazar un recorrido abarcable, variado e interesante. Para completar un poco decido incluir Camboya y así ver los templos de Agnkor. Con la intención de ver un poco más del país, evitar tomar más aviones y no hacer etapas tan largas introduzco también Phnom Penh como parada. Itinerario final (con posibilidad de cambios):

- VALENCIA-LONDRES

- LONDRES-ABU DHABI

- ABU DHABI-KUALA LUMPUR

- KUALA LUMPUR-SIEM REAP

- SIEM REAP-PHNOM PENH

- PHNOM PENH-CHAU DOC

- CHAU DOC-CAN THO

- CAN THO-HO CHI MINH

- HO CHI MINH-DALAT

- DALAT-HOI AN

- HOI AN-HUE

- HUE-HALONG

- HALONG-HANOI

- HANOI-SAPA

- SAPA-HANOI

- HANOI-KUALA LUMPUR

- KUALA LUMPUR- HOGAR DULCE HOGAR

Además de trazar el itinerario es preciso informarse de las formalidades y necesidades existentes en cada país:

1) Para Londres, nos llevamos las libritas ya que sale mucho mejor cambiar aquí que hacerlo allá.

2) La escala en Abu Dhabi es mínima e imaginamos que, en caso de necesidad, se podrá pagar en dólares o cambiar in situ a moneda local.

3) Para Malasia no es necesario visado ni carta de invitación. Solo tener en cuenta que hay pena de muerte para el tráFico y posesión de drogas. No es que nos dediquemos a ello en nuestro tiempo libre pero es bueno saberlo para extremar las precauciones y la vigilancia de nuestras pertenencias. Los ringgits se cambian en el lugar de origen.

4) En Camboya hace falta visado pero lo hace, al momento en el mismo aeropuerto tras pagar religiosamente 20 dólares y entregar una foto, un comité de unos 15 hombres honorables dispuestos a lo largo de un mostrador simulando a la Santa Inquisición. La moneda es el riel pero en los sitios turísticos circula el dólar.

5) Para Vietnam es necesario visado o carta de invitación que se tramita solicitándolo por internet (en caso de llegar en avión) o pidiéndolo a la Embajada en España tras entregar 60 euros y una foto. Como moneda: el dólar y los dongs.

Teniendo todo esto en cuenta y tras mucho leer y recopilar llega el día 23 de octubre:

3

2

1

LA AVENTURA COMIENZA

---

La mañana del 23 de octubre salimos de casa cargados con nuestras mochilas y la ilusión por el inicio de las soñadas vacaciones. Por delante 33 días y 3 nuevos países que descubrir.

Nuestro vuelo a la capital inglesa sale puntual y llegamos a la hora prevista. ¿Cómo no pasear por sus calles? Encontramos un restaurante thai cerca de Oxford Street y no podemos resistirnos a la tentación de sus sabores (Jose como siempre "Green Curry" ya casi podría tener un Doctorado en ese plato ). Al terminar paseo hasta Picadilly y visita a la tienda preferida de Jose (Lillywhites). Caen un par de chanclas . Más paseo hasta la hora de cenar en nuestro pub preferido: Prince of Wales, cerca de Trafalgar Square.

Un último vistazo antes de coger el metro hacia el aeropuerto de Heathrow. El trayecto dura unos 40 minutos. Al llegar buscamos el autobús que nos deja delante de nuestro hotel: Arora Heathrow.

A la mañana siguiente, de nuevo al aeropuerto para coger el vuelo hacia Asia. Estrenamos compañía: Etihad. El trayecto hasta Abu Dhabi dura 7 horas que no se hacen pesadas gracias a la cantidad de entretenimiento disponible en la pantalla: películas, juegos, cursos de idiomas, música... La comida también resulta excelente. Escala de menos de 2 horas que aprovechamos para cotillear un poco el aeropuerto (cómo se nota el petrodólar ) y despegue, esta vez, hacia Kuala Lumpur. Las 7 horas que quedan hasta nuestro destino las pasamos durmiendo .

---

Llegamos al aeropueto internacional de Kuala Lumpur y aunque he leido que merece la pena pasar un tiempo contemplándolo, decidimos dejarlo para el dia de regreso pues ansiamos llegar por fin a la ciudad. También tenemos ganas de ver si realmente existe el hotel que hemos reservado: Royale Chulan, un lujo de 5 estrellas por 60 euros .

Cambiamos algo de dinero en el aeropuerto para pagar el transporte con el KLIA Ekspress, el modo más cómodo y rápido de llegar a KL (en unos 28 minutos). Apenas salir del aeropuerto un paisaje plagado de palmeras nos sorprende. Hasta donde alcanza la vista todo son palmeras de un verde intenso, casi fosforescente. El tren de alta velocidad enlaza sin paradas el aeropuerto y KL Sentral, desde allí se puede llegar en transporte público a casi cualquier parte de KL pero para adelantar tomamos un taxi hasta el hotel.

Realmente existe y es como aparecía en las fotos: ESPECTACULAR! . Por alguna extraña razón nos dan una habitación mejor a la que habíamos contratado: en el piso superior y con vistas a las Petronas. Menudo inicio!

En la información del hotel que hay sobre el escritorio leemos que en uno de los cafés-restaurante, los lunes hay promoción: hasta que se termine el barril, cerveza a 0'99 RM. Al cambio son unos 0'20 céntimos de euro! . A por ellos! Vaya forma de fomentar el alcoholismo! Y eso que es un país mayoritariamente musulmán!. Nos pedimos unas alitas de pollo para hacer base . Realmente deliciosas! Además también tiene vistas a las Petronas, así que comemos con vistas.

Doblemente satisfechos pedimos un mapa y, como no podía ser de otra forma, hacia las Petronas! Están a unos 5 minutos andando. Al salir del hotel nos recibe el clima malayo: no es un calor agobiante pero se nota la humedad.

Doblamos una esquina y allí están. Qué decir de ellas que no se sepa? que son el símbolo de KL y que desde 1998 hasta 2003 fueron el edificio más alto del mundo?. Si de día, impresionan; por la noche, la luz que desprenden sus 32.000 ventanas, hipnotiza. Frente a uno de sus entradas hay un parque con un lago por el que resulta muy agradable pasear, aunque la entrada está prohibida por la noche, no sé si para proteger al paseante o al pequeño bosque urbano.

Un incidente muy común en KL y del que nos han avisado es el tirón de bolso motorizado. En la habitación del hotel tenemos un tríptico acerca de la seguridad en la ciudad y de la cotidianeidad de ese tipo de robo. Así que andamos con cuidado y no llevamos nada colgando a la vista.

Los dos días siguientes los dedicamos a conocer la ciudad. Mapa en mano y a patear! . Cerca de nuestro hotel está una de las zonas comerciales más importantes de KL (Jalan Bukit Bintant). He leido que la tecnología está más barata allí. Entramos en los diferentes centros comerciales (Lot 10, KL Plaza, etc) pero la realidad es otra. Ahora está más cara que en España.

Andando, andando llegamos a Chinatown (donde Jose ya se compra una camiseta de fútbol para matar el gusanillo). Hay varios templos que visitar como el hindú Sri Mahamariamman. Cerca está la plaza Merdeka, el club Selangor, la Masjid Janek, la Masjid India. Vamos a descansar un rato al Central Market que dispone de aire acondicionado (además de cantidad de tiendas de artesanía malaya y productos varios). En la planta baja encontramos un puesto de masaje de pies con peces (1 $ 10 minutos). Lo probamos. Los primeros segundos no puedes parar de reir porque hacen muchas cosquillas, luego te relajas y te acostumbras y los disfrutas mucho.

Seguimos nuestra ruta a pie por KL. Es una ciudad en la que te orientas fácilmente ya que miras hacia arriba y tienes a las Torres Petronas o a la Menara (la de comunicaciones) como referencia. Sin mirar el mapa llegamos a todas partes.

Visitamos también Little India pero, o no acertamos la hora, pero no nos parece nada extraordinario en cuanto a colorido y animación se refiere. Por curiosidad subimos al monorrail, una forma cómoda y barata de desplazarse. Además da la oportunidad de observar la ciudad desde las alturas.

En lo referente a la gastronomía, como en toda gran ciudad encuentras de todo (incluso un bar de Tapas!). Nosotros nos inclinamos por la comida de la zona, así que probamos algunos platos malayos: el nasi lemak (plato nacional a base de arroz y una crema con carne), los satay (pinchos), pato a lo no sé qué. Como no podía ser de otra forma encontramos un thailandés frente al Low Yat Plaza (otro centro comercial). Sí, Jose sigue con su máster en green curry. También probamos un indionesio que hay en el complejo Suria KLCC, en las Torres Petronas. En una de las calles perpendiculares a la Jalan Bukit Bintang también se puede cenar al aire libre en los numerosos tenderetes que hay montados. Por supuesto en Chinatown, la oferta gastronómica también es muy amplia.

Como Jose no quiere madrugar para hacer cola y conseguir una entrada para subir hasta la pasarela de las Petronas (dice que desde arriba no se ven ) optamos por subir a la Torre Menara. Se encuentra en la cima de una colina dentro de una reserva forestal y hay servicio gratuito de furgoneta que te evita el duro ascenso. PUedes comprar la entrada simple (para subir a un piso inferior) o la del restaurante (pagas un poco más y según la hora que sea tienes piscolabis en el piso superior). Llegamos a la hora del te, así que tomamos te y pastitas mientras damos una vuelta de 360 grados sobre la ciudad.

Nos quedan más cosas por hacer, pero lo dejaremos para la vuelta.

---